lo que la impaciencia generÓ

Será que después de tener un día repetible tengo que vivir uno en el que sólo espero que pasen las horas como si fueran segundos para que nos movamos y la luz del sol sea menguada por edificios de historia, fábricas de nubes que deciden bajar en forma de cáncer... electivo claro. Este día tiene demasiados ojos invisibles, sentirse observada, necesito esas miradas que no que no entiendo?, son tan disientes mis manos, mis ojos y mi boca? Ya se van? yo también... Sola pero observada. No tuve suerte hoy... Daniela- Vieja- se va?- no, no llore- no importa no me va a ver, ni siquiera a oír, que le vaya bien, la quiero; garganta asesina... iba a hacerlo pero el sol era demasiado picante como para que no se evaporaran antes de ser. Buscando caras conocidas, distintas a las que realmente quería ver, quemando el tiempo, consumiéndolo... un cigarrillo que no deja que sienta los dedos con los que lo agarro, ni los pies con los que espero, cáncer elegido? No, nunca, sólo quería hacer más material la quema del tiempo, la fogata que hacía con ayuda del sol, y el humo que se impregnaba dentro de mi, tiempo eterno y no inmortal... cigarrillo demasiado corto para que mis ojos dejaran de arder haciendo un esfuerzo vano por ver más allá de mi reflejo, una menta después que se escurre entre mis manos... me regala otra alguien que veía lo que pasaba y se reía un rato para decirme: "eso es que la están pensando"... WTF?!... sigo esperando, viendo quienes entran por la puerta hacia un lugar e el cual no me encuentro... una foto después... una charla... por último una botella de agua, me la tomo... no apareció la sombra que traté de hacer con la mía, con el humo, las cenizas y el tiempo. Tomo agua, casi ahogada termino y con ganas de volver... sólo fue un mal día que hace que trague historias por contar, risas, maldiciones y la despedida... uno? No, medio, siempre está ahí quien no deja que tílde estos días más que de ciertas sensaciones, y no de malditos.

1200mordiendoLAS

Hoy fui víctima de una gota, de la hermenéutica otra vez... mmm... no, así no fueron las cosas, fui víctima de varias, de la lluvia que cae fuerte y moja, de esa que hace más pesado los pasos, de esa que forma charcos profundos que arrancan de nuestra garganta maldiciones, la impotencia, el cansancio, el sueño; víctima de esa lluvia que se evapora fácilmente por el calor que genera el tener que correr para no derretirse debajo de las nubes grises y un tanto pesadas que amenazan con aplastarnos, y entonces decidimos subirnos a un pedazo de metal, incómodo y húmedo, que insiste en aparecer para que volvamos a casa a dormir, para volver a empezar... pero esas gotas que parecían tormenta con cada palabra que escuchaba o que trataba de decir, no eran de las que caen del cielo para bendecir la tierra y arrebatar palabras “malditas” de la boca “des citoyen” al igual que caras largas y gachas de humillación, de rabia, de egoísmo para no caer en el abismo de los sueños, no, esas no eran las gotas que me mojaron hoy, no sólo esas... (que además amo, porque se puede ser víctima del amor también) mientras el sol brillaba y quemaba mi piel, dándole una cálida sensación de compañía, mis ojos otra vez fueron la salida más cercana que encontraron mis sensaciones... pero de lágrimas secas, porque eran invisibles, cómo decirlo? Secas por mi garganta, por mis ganas de hacer el envase cada vez más grande y espacioso... tal vez tenga suerte con eso de morderlas hasta matarlas, pero muertas mojan más, y a veces siento que me hincho, que me lleno de agua, a veces me siento más sensible que siempre... pero ese día todavía no llega y aún puedo escribir sin tener que mojar mis ojos y mis manos...

y la servilleta?

Las lágrimas sólo son cuando dejan de aprisionar el alma agobiada por no poder esconderlas más, por no poder encontrar un recipiente más grande que les dé espacio... que me permita tragar más cuando lo crea necesario, que no me obligue a inundar mis fosas... de líquidos que no quieren volver a su lugar... qué lugar??? Ese lugar de donde llegan y no quieren volver, pero deben hacerlo, son absorbidas nuevamente por mi piel, sanguijuela que no quiere dejar de succionar las penas, alegrías y sueños que una vez más trato de exfoliar, como si fuera sangre... una servilleta tuvo una noche las letras que describen mis sentimientos vueltos vapor primero y después agua, agua salada. no sé si por las costras que se forman a veces dentro de mi, o es simplemente porque no soy dulce, no sin tener que cerrar los ojos cuando se sienta ácido, ácido arrepentimiento de haberlo intentado, de haber probado, para después odiarme un rato... agua salada que tantos contratiempos me trae, sentir, pensar y después tragarlas, saborearlas, tomármelas como si fueran dulces (algunas lo son), todo para caer en un vaso, minúsculo vaso, que veo con claridad incluso si mis ojos están acuosos cuando logro impedir la tormenta o lastimados de tener que soportar mis dedos que salvajemente insisten en exprimirlos y camuflar lo inevitable: las malvadas leyes físicas (que asombrosamente tienen cabida acá) y las de mis sentidos.

Cielo, mar y aire; azules dedos, dulce descanso

Hace rato que no escribo, descuidado sitio el de las letras ahora, el del viento, el de los silencios que incluso dicen tantas cosas, el de los colores que me llevan a la cima, cada roca, cada hierba que piso para abrirme camino en la montaña, cada paso que decido dar, pero al final la mezcla de silencios que me inspiran, imágenes, sentidos que le dan rienda suelta a mi imaginación, me desnudan, tengo unas botas, una chaqueta y un pantalón pero estoy desnuda, nada me acompaña, sólo el cielo y sus creaciones, nada para dejarlo en la historia, serán mis ojos y mis oídos, tal vez mi lengua también, la que decida registrar todo lo que siento, pero por separado, no hay una hoja, una servilleta, tampoco arena, sólo dura roca, y un palito, uno que le quité a un árbol para que me ayudara a subir... ya que lo pienso, la naturaleza ayudó bastante para que pudiera estar acá, pero no tengo donde plasmarlo, donde darle un orden, donde expresarme de tal forma que implique cierto orden para mi, donde dejarlo en mi historia, para que cuando baje pueda volverlo a vivir repasando las letras sucias seguramente que indiquen mi excitación por la belleza y mi necesidad casi animal por encontrar algo que me dejara escribirlo, algo que no fuera duro y que dejara marcarse signos con un significado, que redescubriría abajo... tengo una pregunta, donde estoy? arriba no, es pasado porque lo de ahora son quejas de eso. Abajo? Tampoco no pude hacerlo, me fue imposible, no me tiré finalmente... no sé donde estoy. Bravo! Pero no creo que importe, estoy en una silla, en una casa, en una ciudad, ahh ya!!, estoy en el purgatorio...en fin, era una duda al aire, como todas las que aparecerán regadas por ahí, tal vez también en compañía de una pala, unos pies y unos brazos con sus manos, y sus manos con sus dedos tratando de recogerlas...volviendo a la descripción de la paradoja de tener letras pero no palabras, ó de tener letras, palabras y un contenido importante, demasiado importante y no tener nada para dejarlo en el mundo, mundano? Nooo, por eso! Puta vida, no era mundano, no era de eso que ves todos los días, no es mundano, cotidiano, sin horario, por eso necesitaba darle vida acá, me daba miedo que tal vez no volviera a pasar, me daba? Me dio miedo, lo siento ahora también, miedo, tengo miedo... miedo? No, ya dije que no iba a dejar que mi vida fuera dirigida por la maldita inseguridad, pero es inevitable en este momento, no depende de mi, no es algo que controle,depronto nadie lo hacía... un sueño, eso era... creo que de ahí lo de soñar despierto, para encontrar papel, lápiz, uñas, dedos, saliva, no sé!!!!! Algo para que dejara de esfumarse en mi mente... ni siquiera controlo mis sueños, tampoco cuando me despierto a media noche como si me volviera el alma al cuerpo, como si hubiera decidido dar un paseo al momento de cerrar los ojos y tratando de pensar en mi día o en la hora que tengo que abrirlos nuevamente para encontrar el cansancio y poder cumplir con el ciclo, me duermo... pero sí, decide irse, alma inquieta, mi alma en una parte (que aún no conozco), mi mente en otra( que trato de recordar con una dificultad apremiante), mi cuerpo y mis ojos en otra, no tan interesante, nada interesante porque ya lo conozco bien, sólo cumple el ciclo que ya había mencionado, el que me lleva más cerca de la muerte física, pero tal vez... he hecho cálculos y si aprovecho bien el tiempo tal vez, quizá puedan mis dedos ser eternos, incluso en los sueños que no tienen historia a falta de ellos, incluso, y hablo de eternos cuando digo que escriben en cualquier superficie sin necesidad de tener que mutilarlos, en las salidas a ciegas, porque no conozco realmente a donde va mi alma cuando duermo, dedos eternos, más que mil lápices, mil teclas, tengo dedos eternos, veremos si son la solución, me alegraría que lo fuera, son indelebles...